Recuerdos

Es complicado ver como pasan los días, ver pasar tus recuerdos y tus pensamientos de la niñez para compararlos con los actuales. Recuerdas tus planes de futuro que tenías hace 10 años, y miras a tu alrededor y no ves nada de eso. En ningún lado está ese príncipe azul que tanto ansiabas, ni tampoco tus amistades de entonces. Nuevas cosas llegaron a tu vida, algunas las esperabas, pero otras eran completamente desconocidas para ti y te alcanzaron, sintiéndote desprotegida hacia ellas. Ahora miras hacia atrás, y anhelas aquellos tiempos. Recuerdas, cansada y harta de deberes, que deseabas ser mayor, pero tampoco tanto como papá y mamá, sino como tus primas, que salían con sus amigas por las tardes, e incluso a discotecas, y lo más alucinante era que iban solas, y tú para ir a la plaza de enfrente tenías que ir con tu mamá. Querías ser mayor a toda costa, y le robabas a tu mamá la pintura de la cara para utilizarla en ti; y ahora lo anhelas. Quieres volver a ser pequeña. Sin estudios, sin broncas, sin preocupaciones, sin novios, con amigas, con ganas de comerte el mundo, donde tu mayor problema era un "pues ya no te junto" y no un "lo siento, tienes sida", "no me viene la regla", "está apunto de morir por las drogas", "por tres décimas no me alcanza la nota para estudiar lo que quiero, voy a desperdiciar mi vida", "lo siento, tienes cáncer de pulmón; ohh, porqué fumaría". Todo eso quedó en el pasado, y no lo aprecias hasta ahora. Cuando ves realmente cómo es el presente. Bienvenido a la realidad.